PASTA AL TOMATE
Añada una cucharada de concentrado de tomate y 1 diente de ajo machacado (opcional) a la mezcla de huevo.
Esta variedad presenta un intenso tono anaranjado que se aclara ligeramente con la cocción.
PASTA DE QUESO Y ALBAHACA
Agregue 50 g de parmesano rallado muy fino y 2 cucharadas de albahaca fresca muy picada a la harina antes de mezclarla con
el huevo.
Aderezada con manteca, resulta deliciosa para acompañar cualquier plato.
PASTA DE AJO Y GARBANZOS
Sustituya 125 g de harina refinada por harina de garbanzos y agregue 1/2 cucharadita de ajo en polvo a los huevos.
Sírvala aderezándola simplemente con un poco de aceite de oliva y guindilla o finas hierbas picadas.
PASTA AL LIMON Y A LA PIMIENTA
Añada 2 cucharaditas de piel de limón finamente rallada y 1 cucharadita de pimienta negra molida gruesa a la harina antes
de mezclarla con los huevos.
Resulta ideal para hacer tortellini de pescado servida con una salsa de crema ligera.
PASTA DE ESPINACAS
Cueza 225 g de espinacas hasta que estén tiernas.
Pique las hojas finamente, escúrralas e incorpórelas a la harina antes de añadir el huevo y el aceite necesarios para
elaborar una masa.
Esta vistosa pasta verde es idónea para reparar la lasaña de espinacas o como acompañamiento de un plato de un plato principal.
PASTA INTEGRAL
Esta pasta puede elaborarse únicamente con harina integral, aunque es posible que así resulte un poco pesada.
Para evitarlo, es preferible utilizar harina blanca e integral en partes iguales.
Según el tipo de harina, puede que la pasta se embeba en exceso, en cuyo caso deberá añadir agua fría.
Esta pasta posee un delicioso sabor a nuez y una textura algo más pesada.
PASTA DE ALFORFÓN
Sustituya 200 g de harina refinada por 200 g de harina de alforfón.
PASTA DE ALMENDRAS
Mezcle 125 g de harina integral con 100 g de almendras molidas y 3 cucharadas de azúcar glas.
Añada 2 huevos y 1/4 cucharadita de esencia de almendras y forma una masa con la mezcla.
|